Una aspiración muy sentida del Centro de Ex Alumnos y Amigos del Liceo Eduardo de la Barra, ha sido poder establecer una vínculo comunicacional con todos los ex alumnos y amigos del Liceo, eso forma parte de los objetivos de este centro. Con la creación de este Blog, damos un importante paso en este sentido y desde ya podemos vaticinar que el participar en la generación, mantención y crecimiento de esta herramienta será un bonito desafío, especialmente para quienes pintamos canas, el familiarizarnos con el uso de las tecnologías moderna de comunicación.
La comunicación y la información son un componente fundamental de la vida democrática, pero el proteger nuestra democracia nos exige también un mayor grado de compromiso y un esfuerzo permanente por cultivarnos y crecer.
Invitamos calurosamente a todos nuestros amigos y ex compañeros a participar de esta página, el extender nuestra acción por medio de esta herramienta no cabe duda que ello nos permitirá asumir nuevos desafíos, y sobretodo conseguir que el aporte a nuestro querido Liceo también sea los más significativo posible.
El Director
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Estimados Ex Alumnos del Liceo Eduardo de La Barra. Mi nombre es Raúl Albornoz Díaz y Don Hernando Albornoz Echiburú fue mi tio Abuelo a quien no conocí. Si alguien de ustedes tuviese algo de información de él, alguna biografía o lo que sea, se los agradecería mucho. Estoy reuniendo información para el árbol genealógico de mi familia, y sin duda, me gustaría tener mas información de él. Muchas Gracias
ResponderEliminartu abuelo fue hermano de mi abuelo, raul Albornoz Etchiburu, casado con edith Martu Calvo
EliminarTU TÍO. Fue mi profesor de Castellano por 2 años. Lo recuerdo como un hombre delgado y bajo, de pelo canoso peinado hacia atrás ( y que a veces lucía de un largo moderado), siempre vestía impecable de terno y corbata. Era un fumador incansable: con su voz grave por el tabaco, el idioma de Cervantes brillaba en toda su espléndida riqueza y en sus clases nos volaba relatando una cantidad increíble de anécdotas y vivencias, tanto personales como de los escritores chilenos que nos obligaba a leer. Quizás él los conoció en directo porque manejaba información detallada y curiosa de casi todos: creo que sus preferidos eran Manuel Rojas y Oscar Castro, a Neruda lo respetaba; también admiraba a García Lorca. Era riguroso y estricto en las pruebas y no prodigaba las buenas notas sin real fundamento. Cuando un alumno cometía algún error lingüístico, hacía que casi todo el curso declamara de memoria poemas seleccionados o conjugara verbos en todos los tiempos posibles, y esto con nota. Exigía hablar y escribir correctamente el castellano; el cuaderno para Control de lecturas debía estar impecable en contenido y presentación.
ResponderEliminarDurante los recreos estaba siempre apostado en la puerta de su oficina de director, observando silencioso el ajetreo de alumnos y profesores, mientras como siempre fumaba y fumaba. En fin, un caballero señor como los de antes.
(c) Edu de Val -2000.-
tarde te conteste, pero tienes informacion
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